3 cosas clave que tienes que
preparar:
Conócete a ti mismo:
Aunque parezca
ingenuo, lo primero que debemos hacer al buscar trabajo es conocernos a
nosotros mismos. Sentarnos a establecer qué queremos hacer y para qué somos
buenos, esto puede llevarnos mucho tiempo y esfuerzo, pero también puede
ayudarnos a encontrar un trabajo en el que encajaremos y en el que podremos
desarrollarnos profesionalmente.
¿Qué es lo que
quieres? al comenzar a buscar empleo escribe una lista de cosas que quieras y
que te gusten. ¿Te gusta estar todo el tiempo frente a un ordenador? ¿Te gusta
investigar? ¿Te gusta analizar y dar soluciones? ¿Te gusta estar en contacto
con la gente? ¿Te gusta trabajar con números? ¿Te gusta trabajar con niños o
con animales?. Además de establecer una serie de actividades que te gusten,
también establece en qué tipo de ambientes y rutinas te encontrarías más a gusto
trabajando. ¿Aquel en el que te toca madrugar o en el que te toca trabajar de
noche?, ¿Preferirías el que te ofrece un ambiente calmado o aquel donde siempre
hay movida? ¿En qué sector quiero trabajar?
Una vez tengas
resuelto estas dos listas, establece para lo que tú eres bueno.
Primero, escribe
todos los diplomas o certificados que tengas, ya sea de la universidad, el
colegio, deportivos o cursos que hayas tomado, detalla el tipo de actividades
en las que te has destacado, como en algún deporte, reparando el ordenador...
incluye todo, no sólo actividades que se puedan relacionar con el trabajo.
También debes escribir cualquier característica de tu personalidad que pueda
ser muy valiosa para cierto tipo de trabajos. ¿Puedes tomar una decisión bajo
presión? ¿Interactúas bien con la gente? ¿Te gusta el trato con los niños?
Establece el tipo de trabajo que
quieres:
Antes de establecer
cómo buscar trabajo debes definir el tipo de trabajo que quieres. Redacta lo
que para ti es el trabajo perfecto, incluyendo la gente con la que te gustaría
interrelacionarte, el tipo de horario, los beneficios adicionales que te gustaría
que te dieran, etc. Luego en una hoja haz tres columnas con los títulos de
"Requisito", "Preferido" y "No es fundamental",
ahora relaciona las características de tu trabajo ideal en estas tres columnas,
por ejemplo, si para ti es muy importante contar con un horario establecido,
entonces "horario", irá en la columna de "Requisito", si no
te gustaría trabajar los fines de semana, pero si hay que hacerlo no te afecta,
esto iría en la columna de "Preferido" y por último si te gustaría un
trabajo, donde puedas ir vestido informal, pero no te afecta para nada, en caso
de no ser así, ubícalo en la última columna. Ahora ya sabes qué es fundamental
y obligatorio para ti a la hora de cómo buscar trabajo, qué debes encontrar en
un trabajo para sentirte a gusto, qué es lo que preferirías y que te gustaría
pero no es importante. Esta lista debes tenerla siempre presente cuando leas
los anuncios o cuando vayas a las entrevistas de trabajo.
Define en
qué podrías tú contribuir en un puesto de trabajo.
Otro punto que debemos
tener claro al buscar trabajo, son todos los aspectos en los cuales podamos
nosotros contribuir en un puesto de trabajo determinado. Si has tenido algún
tipo de trabajo, ya sea en prácticas o durante el verano, enumera todas las características
de tu personalidad que sepas que son positivas y aportan valor a un puesto de
trabajo, como actitud positiva, disposición a aprender nuevas cosas,
puntualidad, responsabilidad y compromiso con tus tareas, capacidad de trabajo
en equipo.
Para buscar ese
trabajo que tú consideras como ideal, piensa que tipo de perfil crees que las
empresas necesitarían. Si tú fueras a contratar a alguien para ese puesto, ¿Qué
tipo de persona buscarías? Ahora escribe el tipo de aptitudes o experiencias
que tienes y que encajarían en ese tipo de trabajo. Este ejercicio te ayudará a
definir los tipos de trabajo en los cuales tu podrías contribuir más como
empleado.
Define el
tipo de empresa en la quisieras trabajar.
Lo último que debemos
definir al plantearnos cómo buscar trabajo es el tipo de empresa donde nos
gustaría trabajar y ésta debe ser una de decisión meditada, ya que en ella
vamos a pasar la mayor parte de las horas de nuestra jornada laboral. Debido a
la alta competitividad y la poca oferta de empleo ocurrirá que , en la mayoría
de los casos, no somos nosotros los que optamos por trabajar en la empresa que
queremos, sino en la que nos acepta, pero hay ocasiones en las que, si hemos
realizado una buena búsqueda laboral y un buen proceso previo, podemos
encontrarnos con varias ofertas encima de la mesa, sin saber por cuál de ellas
inclinarnos, y en ese momento es cuando nuestro análisis personal previo nos va
a dar las respuestas a la pregunta de en qué tipo de empresa quiero trabajar.
Cuando tengamos la
oportunidad de elegir entre varias empresas donde trabajar, debemos fijarnos en
una serie de puntos que nos permitirán conocer el tipo de empresa en el que
vamos a trabajar, como son: la cultura empresarial, los compañeros con quienes vamos
a trabajar, si el puesto se adapta a nuestras necesidades personales y sobre
todo la proyección profesional que ésta nos pueda ofrecer.